Cuando decides comprar un teclado musical o piano eléctrico, una de las primeras cuestiones con las que te vas a encontrar es que existen teclados con 49, 61, 76 y hasta 88 teclas, que presentan no solo importantes diferencias de precio si no también de características y prestaciones, y a priori no sabes cuál deberías elegir.
Esta es una de las primeras decisiones que deberás tomar, tanto si vas a comprar un teclado para ti o para otra persona, pues debes asegurarte de hacer la mejor inversión y de que el nuevo instrumento cumple las necesidades y expectativas. En esta entrada te vamos a explicar con claridad en qué se diferencian estos instrumentos (además de en el número de teclas), así como a qué perfil de músico están orientados, para que sepas en cuáles de ellos debes enfocar tu búsqueda en función de tus necesidades.
Elegir un teclado musical de 61 u 88 teclas
Hay tres puntos principales sobre los que debes reflexionar y decidir:
Objetivos: No es lo mismo comprar un teclado para un niño al que parece gustarle la música y quieres que pueda entretenerse y tal vez desarrollar esta afición, que para otro que ya ha experimentado y tiene claro que quiere aprender a tocar el piano, e incluso piensas apuntarle a clases. De la misma manera deberás reflexionar si el instrumento es para ti o para un adulto: ¿buscas simplemente tener un instrumento con el que probar y pasar el rato o vas a invertir tiempo, esfuerzo y dinero en estudiar piano con seriedad, aunque no sea en el futuro más inmediato?
- Tipo de estudio y género de enfoque: Es muy diferente estudiar o tocar piano clásico (para lo cual ya te adelantamos que vas a necesitar sí o sí un piano de 88 teclas), que simplemente aprender a tocar el piano o desenvolverse con un teclado para estilos más modernos, componer melodías, acompañamientos, etc… donde probablemente sean más importantes las funciones accesorias del teclado que el número de teclas en sí.
- Presupuesto: Aunque hoy en día podemos encontrar lo que llamaríamos pianos digitales (de 88 teclas) a un precio más económico que el que pueda tener un piano «real» o acústico, su precio siempre va a ser relativamente elevado, especialmente si se esperan unas mínimas características sonoras y no solamente que parezca un piano a nivel estético. Por eso es tan importante definir los dos parámetros anteriores, porque son los que van a determinar qué tipo de instrumento necesitas y por tanto, en qué presupuesto te vas a mover. Ello te permitirá ahorrarte una buena cantidad de dinero, o bien ahorrarte frustración porque, pese a haber gastado unos cientos de euros, el teclado o no cuenta con las características que necesitabas, o se os «queda corto» demasiado pronto.
Hecha esta reflexión, vamos a ver en profundidad qué aspectos diferencian a los teclados musicales o también llamados domésticos (de menos de 88 teclas), de los verdaderos pianos digitales (siempre de 88 teclas), para que puedas escoger el instrumento adecuado a vuestras necesidades.
Número de teclas u octavas
Una octava es cada conjunto de 12 notas o teclas que, para entendernos, corresponderían a una escala musical. En cada octava se repiten las mismas notas pero, por así decirlo, en un escalón de timbre superior o más agudo.
Un piano digital dispone siempre de 88 teclas (algo más de 7 octavas), que es el equivalente al teclado completo de los pianos tradicionales o acústicos. Por su parte, lo que normalmente llamamos un teclado musical o doméstico puede tener 49 teclas (4 octavas, orientados a los más jóvenes), 61 teclas (5 octavas) o incluso 76 (6 octavas, no son tan frecuentes).
Al principio la cantidad de octavas puede no suponer mucha diferencia, ya que tanto en la enseñanza de piano clásico, como en el aprendizaje enfocado a canciones más conocidas o a música popular, en los primeros meses el estudio va a estar concentrado en las 5 octavas centrales del teclado (un mínimo de 61 teclas es recomendable, salvo que el teclado esté pensado más como juguete que como instrumento). Sin embargo es importante que, si la finalidad es el estudio de piano serio, desde el inicio deberíais poder digitar con ambas manos aquello que se practicará en las clases. Si el instrumento con el que practica tu hijo/a en la academia o el conservatorio tiene las 88 teclas, o si estás siguiendo unas clases on-line de un pianista, pronto encontraréis que a vuestro piano «le faltan teclas».
Pero, más que el hecho de que puedan faltarte octavas, lo que también condicionará esta elección es que el número de teclas va ligado a la siguiente característica de los pianos digitales que vamos a explicarte, y que es bastante decisiva.
Tacto y acción de las teclas: Teclas sensibles, contrapesadas o acción martillo
Los pianos acústicos funcionan mediante un sistema mecánico, donde cada tecla activa un martillo acolchado que golpea la cuerda correspondiente. Este mecanismo otorga a cada tecla un peso natural y un retroceso característico (mayor cuanto más grave es la nota), demandando una fuerza diferente a la que poco a poco la mano se va acostumbrando.
Las teclas de los teclados digitales, al tratarse de un sistema electrónico, a priori no cuentan con este contrapeso natural. Los pianos digitales (de 88 teclas) incluyen un contrapeso artificial para simular lo que vas encontrar en un piano acústico. Es lo que se llama “hammer action” o acción de martillo. Esta característica es necesaria para la enseñanza del piano clásico en academias y conservatorios, que incluye ciertas técnicas propias del piano acústico y donde además se debe entrenar y acostumbrar la mano al tacto del piano real.
Los pianos digitales con teclas contrapesadas permiten disponer de un «piano» en casa a un precio más asequible que el de un piano acústico (que pocas personas nos podemos permitir tener) para estudiar en un instrumento lo más parecido posible al que puedes encontrar en la academia o el conservatorio. Por ello insistimos: si la finalidad es el estudio de piano formal, lo más aconsejable es que te hagas con un piano digital de 88 teclas contrapesadas.
No es común encontrar en el mercado un teclado de 61 teclas con tecla contrapesada. Sin embargo, debes centrar tu búsqueda en que por lo menos tenga teclas sensibles al tacto. Este tipo de tecla, pese a no ser contrapesada y tener un tacto habitualmente más blando que el de un piano, es capaz de captar la velocidad y fuerza con la que la pulsamos y emitir un volumen distinto respondiendo al peso de pulsación, de manera similar a como respondería un piano de verdad.
Esto permite unas posibilidades de expresión musical con las que es imprescindible contar en el corto plazo. La ausencia de teclas sensibles hace que un teclado, por grande que sea y bien logrado su sonido, quede absurdamente limitado para hacer música de verdad, siendo solo un recurso para los más pequeños o inexpertos.
Esto nos deja dos aspectos importantes diferenciados:
Es difícil encontrar teclados de 61 o 76 con teclas contrapesadas; sin embargo la mayor parte de los de 88 teclas vendrán contrapesadas, con más o menos acierto. ¡Ojo, no todos ellos, ni todos merecen la pena! Aquí te dejamos nuestra selección de teclados de 88 teclas con mejor relación calidad-precio
Polifonía
Es el número de notas o tonos que el teclado o piano es capaz de reproducir simultáneamente. Cada nota sostenida cuenta, de manera que, cuanto más compleja sea la melodía, más notas se superpondrán. La calidad de sonido disminuirá si el teclado o piano digital no cuenta con una polifonía razonable.
Cuanto mayor sea la polifonía, más se acerca al sonido del piano acústico real, ya que en la teoría, la polifonía en un piano acústico no tiene ninguna limitación (más allá de la extinción o desvanecimiento natural del sonido).
En los teclados domésticos, según el número de teclas, la polifonía va desde 8, 16, 20, 24, 32 48 y hasta 64 voces normalmente y algunos, los mejores, 128. Los pianos digitales comienzan normalmente en 128 voces de polifonía, aunque para el piano clásico se recomienda un mínimo de 192 voces. Lo ideal es contar con un piano digital con 256 voces de polifonía para un sonido más realista. Podemos encontrar incluso 512 en los modelos más avanzados, pero de cara a la práctica doméstica tampoco es necesario que hagas una inversión tan grande en este sentido.
Funciones adicionales
Otra de las grandes diferencias que podemos encontrar entre los pianos digitales y los teclados domésticos, aunque no siempre se cumpla esta regla, son las funciones adicionales con las que viene equipado cada instrumento.
Por lo general, los teclados musicales ofrecen un gran número de sonidos de instrumentos diferentes, así como canciones de demostración, acompañamientos rítmicos, efectos, etc. Estas funciones, que pueden ser un gran atractivo tanto para niños como para adultos porque permiten mantener la motivación al fomentar la expresión y creatividad, pueden ir en detrimento de la concentración a la hora de estudiar, pero sobre todo de la calidad del teclado como piano en sí (vamos, que normalmente cuando más cosas accesorias lleva el teclado, menor es la calidad de lo verdaderamente importante como el sonido de piano, tacto de las teclas, calidad de los altavoces, etc…)
Los pianos digitales por el contrario, sobre todo los modelos más serios, suelen ser más sencillos en este sentido. En la mayoría de pianos digitales no vamos a encontrar más de 20 sonidos, que por lo general corresponden a distintos tipos de piano, pianos eléctricos, clavicordio y órgano, sin embargo la calidad de estos sonidos incluidos estará, por regla general, más cuidada. Tampoco suelen llevar demasiados acompañamientos o efectos, aunque siempre hay opciones y versiones que los llevan.
Como decíamos anteriormente es importante que hagas una buena reflexión sobre hasta que punto necesitas estas funciones según el uso que vayas a hacer del piano. Por supuesto también deberás considerar otras cuestiones que puedan ser necesarias para ti como la conectividad o portabilidad, pero estos aspectos ya no van tanto en función del tipo de teclado que elijas (61 u 88 teclas ) como del modelo en concreto.
Por ejemplo, aunque por lo general un teclado de 61 teclas será más portátil que un piano digital de 88 teclas, hay modelos como el Roland GO 88 que puede funcionar a pilas y solo pesa 7 kg, mientras que alguno de 61 teclas puede llegar a ser incluso más voluminoso.
Nuestras recomendaciones
Es cierto que, si eres principiante, o si estás buscando un teclado para tu hijo o hija, no puedes saber a ciencia cierta si esto del piano es para vosotros o no.
Pero, por experiencia, sabemos que las posibilidades y alegrías que nos da un buen instrumento muchas veces son la clave que necesitamos para mantener la motivación. A la hora de comprar un teclado para un niño que va a estudiar piano, cuanto más parecido tenga con el que utiliza en la escuela, mejor avanzará y más satisfacción obtendrá, lo que se traduce en mayores posibilidades de continuidad.
Por ello es tan importante ajustarse a las necesidades de cada cual y escoger con conocimiento, sin quedarse cortos en prestaciones pero teniendo en cuenta también que, a veces, menos es más 🙂
Seguro que, si sigues nuestros consejos, encontrarás el teclado musical perfecto para vosotros. Recuerda que, tanto si te has decidido por un teclado musical de 61 teclas o por uno de 88 teclas, tienes más información y nuestras recomendaciones de modelos aquí: